Afectos Sonoros es un trabajo de experiencia inmersiva donde se complementa luz y sonido para afectar de manera abstracta a los cuerpos. Cada quien por medio de su propio cuerpo, su propia experiencia de vida, sus recuerdos y sensibilidades personales realiza un viaje sonoro lumínico, se deja afectar y se afecta con otros cuerpos.

La narrativa lumínica se complementó con la sonora, comenzando con elementos muy básicos en la Sala Negra, para luego sumar elementos hasta abrir el portón y unir las dos salas.

En la Sala Negra todo el trabajo lumínico es monocromo. Se viaja por distintas tonalidades de azul y la luz es controlada por una consola DMX, transformando manualmente el tono de azules, ademas de la intensidad. En la medida que el sonido se va complejizando, comienzan movimientos lumínicos, efectos de barrido y destellos como una tormenta. Toda la iluminación está dirigida hacia el cielo, por lo que el efecto es un baño lumínico inspirado en la luz de la noche, luna, tormenta y rayos.

Luego de este desarrollo se abre la sala blanca lentamente y el sonido comienza a venir desde ese nuevo espacio que se suma a la experiencia. Aparecen los colores, la luz llama al cuerpo y a la atención a dirigirse hacia ese foco. Las personas se sienten abducidas por este lugar colorido. La sala blanca ya no se ve blanca sino que aparece la gama cromática completa, las lucarnas han sido filtradas con gelatinas RGB y la luz natural tiene leves movimientos y tonalidades que cambian.

El sonido se va desintegrando, los cuerpos sienten sus propios Afectos.